La propuesta arquitectónica responde a la necesidad de ofrecer a la comunidad, en especial a los niños y la juventud (vínculos entre padres e hijos) y a los futuros profesionales de disponer un espacio donde se realicen en optimas condiciones las practicas en salud mental infantojuvenil, como ser: tratamientos grupales (grupos de espera de tratamiento, grupos terapéutico de adolescentes, grupos de construcción y juego); como así, también a profesionales rotantes de las residencias de psiquiatría y psicología clínica y pasantes de las carreras de fonoaudiología, psicomotricidad, medicina y pedagogía. Se contempla jerarquizar el conjunto proyectado, creando una circulación peatonal desde el acceso principal al gran predio, la cual se conecta al ingreso del S.U.M a través de un gran desborde de baldosones de colores, canteros triangulares y cartel de acceso. A través de este desborde, se vincula al gran espacio verde, con características de plaza urbana que expresa gran plasticidad, otorgando dinámica y movimiento, a través de los bancos semicirculares propuestos, que a su vez lo circundan. El equipamiento propuesto buscó satisfacer las necesidades de sus ocupantes a través del uso coherente del espacio, conformando islas de actividades de diferentes funciones. Se incorporaron espacios: De juegos infantiles; Juegos de Destreza; Rayuelas; de Descanso Pérgola; Merenderos y (recuperación) Asador con equipamiento como ser mesones y bancos.-]]>